Como al mediodía me voy y no regreso hasta el domingo al mediodía, voy a subirles un par de cosas para que se instruyan y deleiten. La primera es este precioso artículo de dos páginas fechado en 1954. Verán que glosa un impresionante invento de indiscutíble encanto: el laborógrafo. Interesante muestra de retrofuturismo cañí, no tiene desperdicio, pero antes de dejarles con su lectura (que presupongo atenta) me gustaría destacar unas pocas cosas:
1 - ¿Qué se hizo de ese coche milagroso que podía aparcar de lado?
2 - ¿Es casual que el creador del laborógrafo sea catalán?
3 - ¿Qué impulsa a los trabajadores a escaquearse cuando no está el jefe?
4 - ¿Qué se entiende por "grandes efectos psicológicos?
5 - ¿Cuando imaginan al Caudillo felicitando efusívamente sienten pavor o les entra la risa floja?
6 - ¿Continua operativo el Laborógrafo en Alemania y EE.UU.?
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