30.6.10

LA MUJER Y LA CIENCIA DE LA ILUMINACIÓN

"En general, la mujer, maestra en el arte de agradar, no ha aprendido aún la ciencia de la iluminación. En la tertulia o el teatro escoge su asiento a la buena de Dios, sin caer en la cuenta de que hay luces que achagrinan la piel, turban la armonía del color y de las lñineas y echan diez años encima."
De El pesimista corregido, relato breve de Santiago Ramón y Cajal (1905)

26.6.10

9 DE MAYO DE 2003, EL DÍA DE LA GRAN VICTORIA

“La venerable España, que veía renacer en sus hijos emancipados de allende los mares las glorias de su raza imperecedera, declaraba aquel día fiesta nacional, y la fecha del 9 de mayo de 2003 se inscribía en letras de oro en el Salón de sesiones de las Cortes.
(…)
Los Estados Unidos del Norte adquirieron durante la pasada centuria enorme crecimiento, hasta el punto de que su inmenso territorio apenas bastaba para contener la población, y amenazaban con un desbordamiento a costa de los países de origen latino.
Méjico, las repúblicas del centro y Colombia, como más directamente interesadas, la primera porque veía en peligro sus fronteras septentrionales, y las restantes porque so pretexto de los canales interoceánicos, el Gobierno de Washington pretendía someterlas a una tutela, que rechazaba la dignidad nacional, dieron la voz de alerta y reclamaron el auxilio de los demás estados americanos.
Las notas diplomáticas que los representantes de aquellas repúblicas dirigieron a sus hermanas fueron acogidas al principio con marcada tibieza, porque nadie creía el riesgo cercano; pero la noticia de que los anglo-americanos habían violado el territorio de Méjico, y de que pretendían enviar un ejército de ocupación a Nicaragua, Costa Rica y Panamá produjo un grito unánime desde Río Grande del Norte hasta el Cabo de Hornos. Todos los gobiernos, impulsados por el generoso y espontáneo movimiento de la opinión pública, pactaron una alianza ofensiva y defensiva, y aprestaron sus formidables huestes y sus escuadras submarinas para salvar la independencia de la América Latina y la exclusiva preponderancia en ella de la raza ibérica.
España, que no podía permanecer indiferente a una lucha gigantesca en la cual se ponía en tela de juicio el principio de raza, de lengua y de costumbres que eran las suyas propias, prestó desinteresado y noble concurso a sus hijas americanas, y de Cádiz salió la escuadra submarina que, en unión de las demás aliadas, contribuyó al desastre de la poderosa armada de los Estados Unidos.”
Fragmento del relato Un viaje a la República Argentina en el siglo XXI, de Nilo María Fabra, publicado en 1889, es decir, hace 121 años. Aquí pueden leerlo online. Mi gusto por la política ficción se exalta con cosas como esta. A diez años de la Guerra de Cuba, en la que España perdió su última colonia a manos de los EEUU, el escritor imagina una utopía situada en nuestra época en la que unos EEUU superpoblados invadían el resto del continente.


Nilo María Fabra
(1843-1903) fue un personaje curioso que hoy es objeto de recuperación por ser nuestro principal pionero de la ciencia ficción. Hace unos años tres de sus relatos fueron incluidos en De la Luna a Mecanópolis: Antología de la ciencia-ficción española (1832-1913) (Acantilado, 1995). En 2006 la Biblioteca del Laberinto recopilaba buena parte de su obra de género con Relatos de ciencia-ficción; y ahora Berenice acaba de publicar otra antología (muy coincidente con la anterior) titulada La Guerra de España con los Estados Unidos y otros relatos.

Pese a sus ribetes decimonónicos, Nilo Maria Fabra me parece un escritor ágil gracias a su carácter de periodista profesional, del mismo modo que me interesa esa escritura del futuro por venir. Con el relato que da título a la antología de Berenice se adelanta en unos años al desastre de Cuba (aunque hierra en el final del conflicto). También predice la I Guerra Mundial en El desastre de Inglaterra de 1910 (escrito en 1885), pese a dejarse llevar por su tirria ante lo anglófilo (siempre pérfido, ambicioso y rapaz). Además de hacer historia del futuro, no deja de lado las ucronías, como en Cuatro siglos de buen gobierno (una candorosa historia de España en la que los Austrias nunca alcanzaron la Corona) y las distopías reaccionarias, que incluyen un relato tan potente como Teitán el magnífico: Cuento de lo porvenir (1895), auténtico precedente del 1984 orwelliano (aquí el pdf de su publicación original en la revista La ilustración española y latinoamericana).

Curiosamente, el hoy poco recordado Nilo María Fabra fue figura importante del periodismo español por su visión de futuro, ya que fue el fundador de nuestra primera agencia de noticias, la Agencia Fabra, germen de la Agencia Efe. Así que otro elemento interesante de sus relatos fantacientíficos y de anticipación es verle fabular con los medios de comunicación del futuro.

En el inicio de Un viaje a la República Argentina en el siglo XXI describe el Noticiero Parlante:
Sobre una mesa estaba otro fonógrafo en relación con los alambres exteriores, merced a los cuales el tren comunicaba con la red universal telefónica. En dicho aparato, que hacía las veces de periódico, se imprimían silenciosamente noticias del mundo entero, y a voluntad del viajero funcionaba para reproducirlas. Me acerqué al Noticiero parlante, que así se llamaba aquella ingeniosa máquina, y vi que tenía una serie de botoncitos, junto a cada uno de los cuales se leía en letras de metal: Europa, Asia, América, Oceanía, Bolsas, Mercados, Miscelánea.

En En el planeta Marte (1890), además de definir el telefoteidoscopio (aparato que por medio de hilos eléctricos reproduce las imágenes en un espejo, por grande que sea la distancia entre aquéllas y este) describe un audioperiódico que se preocupa de evitar la libre distribución de sus contenidos:
"Resonancia Universal es el nombre del periódico más oído del planeta Marte.
Para los suscriptores hay fonógrafos a casa hita que, sin más trabajo que oprimir un botoncito, repiten los telefonemas impresos o grabados en el peregrino confidente.
Al público en general, para enterarse de las diarias noticias, le basta depositar una moneda en aparatos que abundan en calles, plazas y caminos. Apenas cae la moneda dentro del ingenioso fonógrafo, habla éste en voz baja, a través de una reducida abertura, de modo que sólo pueda valerse de él una persona, y no resulten defraudados los interesados en la empresa."

Y para acabar, el distópico Teitán el magnífico describe la red de telecomunicaciones que usa su particular Gran Hermano:
"Inmensas redes de alambres telegráficos y telefónicos y de cables subterráneos y submarinos cruzaban en todas direcciones, y el Monarca universal regía al mundo con un ejército de electricistas, al cual estaba confiado el resorte más poderoso del Gobierno: el espionaje.
Cubiertos los techos y paredes de los edificios y pavimentos de las calles y caminos de millones de micrófonos, en comunicación con el ministerio de Policía, los sonidos, por distantes que fuesen, llegaban a él y se imprimían en aparatos telefonográficos; mientras que innumerables cámaras obscuras transmitían por medio de teleteidoscopios las imágenes lejanas que reproducía en colores, con fidelidad y exactitud notables, la telefotografía".

20.6.10

EL SATANISMO ESCÉPTICO

En cierta ciudad griega en la que el arzobispo resultaba ser un hombre de gran virtud, moraba una noble dama de virtud también inexpugnable. El diablo adoptó una noche la forma del arzobispo y se metió en la cama de la dama. Gritó entonces la mujer y el diablo se escondió debajo de la cama, pero los sirvientes que corrieron a la habitación lo sacaron a rastras de su escondrijo y lograron expulsarlo de la casa a fuerza de golpes y maldiciones. Corrían otras historias acerca de obispos que fueron sorprendidos en lances amorosos, pero desde luego aquellos aventureros no eran sino diablos disfrazados”.
No conocía a Joseph McCabe (1867-1955), un ex monje franciscano británico que tras abandonar la orden se dedicó a combatir la superchetería inherente a toda religión y, en especial, la hipocresía de la que ha hecho gala la curia católica a lo largo de los siglos. Como decía, no conocía al tal McCabe hasta que paseando por una de tantas librerías que visito me sentí del todo atraído por su Breve historia del Satanismo. Parte principal del inevitable impulso que me llevó a comprármelo de inmediato, además de la temática, era su carácter de libro pequeñito bellamente editado por Melusina.


En el momento de escribir esta reseña ya me he leído sus amenas y divertidísimas 134 páginas en dos ocasiones, y en el breve espacio de mes y medio. Supongo que poco más puedo añadir para demostrar mi entusiasmo. Bueno, sí, ya he dicho por aquí en varias ocasiones que me encantan los libros que me llevan a seguir indagando por ahí, que me abren temas y me regalan ideas. Este es uno de esos casos. Además, Joseph McCabe escribe de manera sencilla y hace gala de un tremendo sentido del humor, muy británico y cargado de ironía y mala leche.
“(...) como no podían encontrar en Roma a un clérigo que superase las cuatro pruebas a las que se sometía a los candidatos (sodomía, adulterio, bestialismo o fornicación), trajeron papas alemanes. Sin embargo, los romanos enviaron a la tumba a seis de ellos en el plazo de trece años. León IX, el que más duró de todos ellos y también el más sabio y piadoso, relata en una carta que se ha conservado que tenía una tía minja que vivía en un convento de monjes. Tenía un enano en su celda, y resultó que el enano era, en realidad, un demonio”.
Se inicia esta historia de Satán, rey de los demonios para la cultura popular, con un repaso antropológico a las religiones babilónicas en las que nace el mito, prosigue con su incorporación al cristianismo como uno más de los muchos diablos, se adentra en la primera Edad Media, que considera época bárbara y oscura, desmontando cualquier idea de racionalidad en Santo Tomás de Aquino (un tipo fascinado con la idea de relaciones sexuales entre humanos y demonios) o San Agustín (que llegó a escribir un poco difundido tratado sobre el semen de los demonios). Se aventura, luego, a elucubrar con la existencia de una auténtica religión dedicada a Satán en los años de la Inquisición, aportando numerosos datos al respecto. Pese a su combativo escepticismo, McCabe llega a considerar la religión satánica de ese periodo como reacción humanista y alegre a los excesos de la iglesia católica y le da tintes casi prerevolucionarios.


También se habla de cultos satánicos en la corte de Luis XIV y finaliza con la impostura de finales del siglo XIX que unió masonería y satanismo con el beneplácito de los Papas de la época. Continuando este último capítulo, el libro finaliza con un jugoso apéndice dedicado a Leo Taxil, autor de uno de los mayores fakes satánicos de la historia. Por cierto, supongo que por fecha de publicación, pero no encontraran referencias a Crowley o LaVey, los dos satanistas más conocidos del siglo XX.



Buscando datos sobre McCabe he dado con esta web en la que se traduce al castellano parte de su Historia de la controversia religiosa; y aquí algunos extractos de Las Mentiras y falacias de la Enciclopedia Británica: Cómo fuerzas poderosas y del clérigo castraron un famoso trabajo de referencia. Sólo he podido hacer una lectura en diagonal, pero parece un texto tan contundente, divertido y cabal como esta Breve historia del Satanismo.
“Para cualquier historiador que se abstenga de comulgar, la desintegración de una religión es el paso necesario que conduce a un progreso de la civilización, pero de las ruinas de una civilización no surge ningún progreso espiritual.”
satan was a lesbian

19.6.10

EL QUE VUELA ATRÁS EN EL TIEMPO

anacronopete
“Qué es el tiempo? El tiempo es movimiento; en la inacción no hay ni antes ni después.
(...)
El Anacronópete, que es una especie de arca de Noé, debe su nombre a tres voces griegas. Aná que significa ‘hacia atrás’, cronos ‘el tiempo’ y petes ‘el que vuela’, justificando de este modo su misión de volar hacia atrás en el tiempo; (...) Su motor es la electricidad, fluido al que la ciencia no había podido hacer viajar aún sin conductores por más que estuviese cerca de conseguirlo y que yo he logrado someter dominando su velocidad. Es decir, que lo mismo puedo dar en un segundo, como locomoción media, dos vueltas al mundo en mi aparato, que hacerlo andar a paso de carreta, subirlo, bajarlo o pararlo en seco. Dado el agente impulsor, todo lo demás son procedimientos mecánicos cuya relación ningún interés despertaría, especialmente en un público que sabe de memoria las obras de Julio Verne.
(...)
Como el tiempo para envolverse en la Tierra camina en dirección contraria a la rotación del planeta, el anacronópete para desenvolverlo tiene que andar en sentido inverso al suyo e igual al del esferoide o sea de occidente a oriente. EL globo emplea veinticuatro horas en cada revolución sobre su eje; mi aparato navega con una velocidad ciento setenta y cinco mil doscientas veces mayor; de lo cual resulta que en el tiempo que la Tierra tarda en producir un día en el porvenir, yo puedo desandar cuatrocientos ochenta años en el pasado."
Fragmentos de El anacronópete, de Enrique Gaspar, publicado en 1887. Del mismo modo que el hispanista presume de Monturiol o de Juan de la Cierva, el fan español de la ciencia ficción puede recordar que la primera máquina del tiempo, anterior a la de HG Wells, nació en esta novela hoy olvidada (y que no ha envejecido demasiado bien). Las ilustraciones, firmadas por F. Gómez Soler, pertenecen a la edición original que pueden contemplar aquí escaneada.

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14.6.10

PRESIDENTIAL POP: VISIONES DE BUSH EN LA ERA OBAMA

El 20 de enero del año pasado se iniciaba la era Obama. El año y medio transcurrido es, más o menos, el tiempo medio habitual en el que un tebeo norteamericano llega al mercado editorial español. Las últimas semanas he acabado pensando en este gap temporal y en como la perdida de actualidad afecta nuestra lectura. Por ejemplo, los que seguimos el universo Marvel a ritmo Panini vemos como la saga principal que nos ocupa estos días, el Reinado Oscuro, tiene como protagonista a un Norman Osborn que cuenta con el respaldo presidencial para dirigir una gran agencia de espionaje que toma el relevo de la clausurada SHIELD. Resulta obvio que tener a un gran villano en el ejecutivo del gobierno es más propio, en términos pOp, del anterior gobierno republicano que de la colorida era Obama. Habrá quien me diga que esto son sólo tebeos, y no le faltará razón, pero el comic-book norteamericano de superhéroes siempre ha mirado a la política que le era coetánea. Ejemplos los hay a puñados. Por otro lado, al fin y al cabo los superhéroes hacen del uso del poder y sus consecuencias su principal leitmotiv, y el reflejo más inmediato del poder en la realidad es, precisamente, el del gobierno de su nación.


Así pues, cuando leo los tebeos relacionados con el Reinado Oscuro marvelita no dejo de tener la sensación de que suenan a pasado. Obama ya tendrá tiempo de hacer maldades, que es algo inherente a la gestión real del poder, pero es obvio que desde una perspectiva pOp aún no le toca y sólo un presidente como Bush podría nombrar a Osborn como miembro de su ejecutivo.

Les expongo todo esto porque por cosas del azar y casi de seguido he tenido esa misma sensación, la de leer algo que ya no toca relacionado con la política presidencial yanqui, con tres tebeos que han caído de mis manos casi de seguido: Black Summer, Ex Machina 8: Juego Sucio y The Boys 5: Herogasm.


Disfruto mucho con los Boys de Garth Ennis (que aquí publica Norma). Una cruel sátira de los superhéroes que combina dosis más que generosas de sexo y violencia, además de un curioso juego con el mercado editorial a base de petardos metalingüísticos. Herogasm, la quinta entrega española, es en realidad un spin-off fuera de colección, pero dentro de la continuidad, en la que se explica la realidad de los megacrossovers (relean la frase y su entramado aquellos a quienes lo de “petardos metalingüísticos” les haya sonado a chino). La realidad de los megacrossovers es que son pura pantomima y los supers, en realidad, alquilan un hotel de lujo y lo llenan de prostitutas (y prostitutos) para pasar una temporada en una multitudinaria orgía. Me ha sorprendido lo explícito del sexo y la cantidad de desnudos frontales masculinos, pero mejor no nos apartemos del tema que nos ocupa. En la subtrama de The Boys, aquí más evidente que nunca, está el conflicto entre dos oscuras multinacionales que serían reflejo de las Halliburton o Black Water. En la lucha de poder entre ambas, bien enquistadas en la Casa Blanca, se da una versión bastante curiosa del 11-S (que sumar a otras que ya hemos visto por aquí) en la que el presidente habría hecho lo correcto hasta la intromisión de un vicepresidente que además de deficiente mental cuenta con el apoyo de una de esas multinacionales. Sería este vicepresidente subnormal el culpable de que los aviones se estrellaran en las Torres creando un contexto de interés para la multinacional que le mueve. Me hace gracia la idea de un Bush capacitado, es decir, que el idiota no era él, una gracia más a sumar en la larga cuenta del gamberrete de Garth Ennis.


La serie Ex-Machina de Brian K. Vaughnan y Tony Harris es uno de mis ejemplos preferidos sobre el impacto del 11-S en los tebeos de superhéroes. Al fin y al cabo es una ucronía en la que un superhombre salvó una de las torres, un superhombre que hoy es alcalde de Nueva York. Ex-Machina juega muy bien con los dos planos: el pasado heroico (y misterioso) de un hombre que puede comunicarse con las máquinas y la realidad política de un alcalde que se enfrenta a todo tipo de problemas (matrimonio gay, liberalización de la marihuana). La estructura narrativa a base de flashbacks, por cierto, la empareja con los inicios de Lost (y no es casualidad: Vaughnan fue guionista de la serie en sus temporadas intermedias).

Pero a lo que iba. En la reciente octava entrega de la edición española se junta una convención republicana en Nueva York con la presencia de una antigua grupie del héroe reconvertida en activista antiBush. Resulta interesante como el protagonista afirma
“He conocido a Bush y le creo un buen hombre, pero no sé si voy a votarle”.
Una frase chocante, al menos para nosotros, y que resulta algo ambigua ideológicamente. Como alcalde nuestro hombre ha hecho gala de políticas liberales de muy poco agrado para un conservador. Por otro lado, resulta lógico que un tipo que en el pasado se ha enfundado una mochila voladora para combatir el crimen por su cuenta sienta simpatía por Bush.

Pero Vaughnan contrarresta esa frase con las pintadas de su grupie activista. En una podemos leer Bush Suck Cocks (Bush comepollas) y en otra Bush=Osama. Mensajes breves y directos que sorprende encontrar en un tebeo de superhéroes más o menos mainstream (por muy ajeno a las dos majors que sea).


Para cabar con estas muestras de tebeos realizados en contexto preObama que nosotros leemos tarde, nada mejor que una gamberrada de Warren Ellis como es Black Summer. Vaya por delante que del material de Ellis para Avatar que está sacando Glénat, Doktor Sleepless o Anna Mercury me parecen más compactas, pero Ellis siempre es inetresante. Además, el dibujo de Juan José Ryp añade otras virtudes gráficas al tebeo. Por lo que hace a la visión política del reinado de Bush, el cómic no puede ser más elocuente. Un superhéroe hastiado se cuela en la Casa Blanca y asesina a todos los miembros del gobierno que allí encuentra. A continuación, y aún cubierto de sangre y sesos, lanza el siguiente mensaje por televisión:
“Creo que la guerra de Irak es ilegal y está basada en mentiras. Creo que nuestra gente y la suya está muriendo para beneficio de las corporaciones. Creo que ahora América no es libre (...) Creo que esta administración robó las últimas dos elecciones y que estamos bajo el gobierno de criminales”.
Ellis es ciertamente un subersivo de cojones, y aunque el tebeo discurra luego por cauces más conocidos (un entramado de mentiras y un espectáculo de hostias) la contundente imagen que les dejo abajo ligada a tamaño mensaje es contundente y significativa, pero lo sería más enmarcada dos años en el pasado (el tebeo se publico originalmente en el 2008) y no en la actualidad. Tiene sentido como agitación antiBush pero eso ya es el pasado y a Obama aún no le ha dado tiempo a ser el malo que merece ser ejecutado en clave pOp.

11.6.10

QUERIDA ADELE,



Te escribo porque tras muchos años he vuelto a tu regazo y siento que el tiempo te ha sentado de maravilla. Eso me hace feliz. Has regresado con una colección integral y el primer tomo recoge tus cuatro primeras aventuras, aquellas que releí una y mil veces hace ya más de veinte años. Y hasta te han hecho una película. ¡Quién lo iba a decir!. Algunos tienen dudas, pero a mí no me da miedo: la chica que te hace carne es mona y me cae bien Luc Beson; además tengo muy claro que no será lo mismo porque Adele sólo hay una, y es de papel.



Pues eso, que quería decirte que volví a tus cuatro primeras aventuras y ya no pude parar, y seguí con todas. Me alegra saber que por fin podremos leer El laberinto infernal, que se había quedado inédita. Vuelvo a tus inicios y veo pterodáctilos redivivos del museo de Historia Natural y momias que vuelven a la vida para protegerte. Por en medio se queda una secta babilónica y un pitecántropo culto y enamorado, como yo. Pero creo que esos no van a salir en la película porque todo no puede ser.


Adele, tu eres el folletín y por eso me gustas tanto. Científicos locos, policias absurdos, malechores, sectas secretas, artilugios imposibles. A tu lado hay decenas de personajes que van y vienen, que entran y salen, que mueren y a veces resucitan, regresando en una continuidad tan imposible como alocada; personajes que te odian y aman, y que se persiguen eternamente por las calles de París.

París.

Adele, tú eres París. Y no un París cualquiera. Un París casi mágico, lleno de subterráneos secretos, cementerios, puentes y monumentos donde siempre desaparece gente, un París de jardines botánicos donde te aguardan trampas mortales y a donde siempre acudes porque en realidad te da todo un poco igual. Tu estás ahí no se sabe muy bien cómo, en medio de un ajetreo coral que no olvida gendarmes en bicicleta ni vagabundos bajo un puente. Pobres vagabundos, siempre acaban en las fauces de un monstruo que surge del Sena.


Al final de tu cuarta aventura, querida Adele, tu padre se volvió como loco, llevó al absurdo los cabos que atan todo folletín y, encima, te mató. Hubo quien dijo que le pasó lo mismo que al padre de Sherlock Holmes, pero yo no me lo creo. Llegaba la Primera Guerra Mundial. Las fechas y la historia mandan, y tu padre quiso protegerte de tanto horror, un horror que conoce muy bien. Así que te hibernó.

Regresaste, Adele, con un extraño interludio a cargo de Brindavoine, uno que regresaba mutilado de la guerra y que te estuvo buscando durante una aventura en la que eras como Blancanieves esperando un beso. Es curioso lo de Brindavoine, porque en realidad estuvo antes que tú. Ahora pienso que en un primer momento fue una muy primitiva encarnación de tu espíritu. Un alborotado error de juventud. Un germen que acabó formando parte de tu jardín.


Cuando por fin regresaste, todo fue más loco. Tus aventuras rozaban el absurdo mientras tu leías en la bañera. Ai. Adele en la bañera. También te volviste más autoconsciente. Te sabías personaje de un tebeo con sus propias claves y así lo confesabas de vez en cuando. Y los horrores de la guerra vividos por tu portadista pulp creaban pulpos gigantes que encima eran carmesís. Y había un circo e invitados que dibujaban monstruitos. Y científicos locos, esos nunca te faltan revoloteando a tu alrededor. También hubo crustáceos del cretacio en las alcantarillas y mujeres celosas que se vestían como Irma Vep, la de Feuillade, para matarte. De esto me doy cuenta ahora porque a Musidora la conocí después de tí..

Y hasta te salió una hermana pequeña que nos dejó en albis, a la espera de ese laberinto infernal que por fin podremos leer, aunque sea a otro tamaño.

Querida Adele, perdona por el rollo. Podría haber sido mucho más escueto y directo. Podría haber ido al grano mucho antes.

Querida Adele, te quiero.

10.6.10

TERRORES DIPRETA

Mientras andaba yo haciendo el cenutrio por A Coruña, se hacía pública la muerte de Tony DiPreta. No era un dibujante conocido por aquí, ni tampoco reivindicado, pero era una firma que me caía simpática cuando la veía en las historietas de complemento de los tebeos de Vértice. DiPreta fue un currante de la Edad de Oro que pasó por un porrón de editoriales, y la explosión del tebeo de terror anterior al code le pilló como miembro de la plantilla de la Atlas, de ahí que algunas de sus viejas historietas se publicaran de manera dispersa por España. Como los horrores precode son uno de los temas favoritos de este blog, he seleccionado unas cuantas de sus viñetas a modo de homenaje. Vampiros, momias, zombies, calaveras y todos los miedos de la época pasaron por sus lápices.

The Hidden Vampires

One foot in the grave

Zombie

Zombie (2)

Accidents will happen

Under the knive

Woman who wasn't

Witch doctor

Mummy lives

Mummy lives (2)

Night crawlers

Night crawlers (2)

Night crawlers (3)

Kiss of death

Kiss of death (2)

8.6.10

MUNDO FUTURO

Veo la galería de ilustraciones políticas de George Grosz que subió Pulpnivoria hace unos días y pienso, así de repronto, que esas eran las verdaderas imágenes del futuro y no las naves espaciales de la edad de oro de la novela de anticipación. Realizadas por Grosz ("bolchevique cultural número uno" para el Tercer Reich) en el periodo de entreguerras, hace una década nos hubieran sonado a rancio: la lucha de clases estaba enterrada y los soviets bien muertos. Hoy no. Tras los desmanes del Capital (así como suena, ai Dios) tiremos de (su) carro de nuevo. Ya no se trata de exigir nuestras merecidas vacaciones en la Luna; casi 100 años después resulta que el Futuro por venir, el mundo del mañana que nos esperaba, era ese, el mismo que dibujaba Grosz.

4.6.10

ARTE pOp EN PAKISTÁN

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Lo que tienen a continuación es una extensa colección de postales que me cedió Rubén Lardín para el disfrute de todos ustedes. Una galería de carteles de las películas de acción de los 70s que se rodaban en Pakistán para consumo interno. Mayor exotismo imposible. Filmes ignotos promocionados con unas ilustraciones que son puro gozo de derribo pOp. Bigotudos mujaidines blandiendo un catálogo de afiladas armas que supongo tradicionales, aunque no hay que descartar cierta influencia de las joyas de la Shaw Brothers dedicadas al armamento afilado (de ese que tanto espanta en Israel). Hay que destacar que todas esas armas están bañadas en sange. Sangre a espuertas. También hay jamonas del gusto local armadas con metralletas. No llevan bikinis de leopardo pero es evidente que son de armas tomar.

Al margen del gozo estético, propio de estos tiempos multicultis, debo decir que en realidad todos estos carteles dan miedo. Mucho miedo. Pakistán es un páis con millones de habitantes, bombas atómicas y unas encuestas que demuestran que si Bin-Laden se presentará a presidente arrasaría con la mayor parte de los votos. En realidad, no dejo de pensar que esa sangre chorreante que luce en todas las armas es nuestra sangre. La sangre de occidente tras el Apocalipsis P.


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