La obra maestra de Deodato sigie ahí, atrayendo y repugnando por igual, y adquiriendo nuevas perspectivas como obra más clave de lo que parece para el audiovisual contemporáneo. La gente, además, se puso a googlear, y muchos llegaron a una vieja entrada de este blog en la que explicaba el fenómeno que supuso el muy exitoso estreno del filme en España y la campaña que lo vendió como real, así como la denuncia sobre el timo que publicó La Vanguardia. Denuncia que no sirvió de mucho porque durante décadas Holocausto caníbal ha sido la estrella de cientos de conversaciones coloquiales en las que aparecía como película "que era verdad". La culpa la tuvo, en realidad, el semanario Interviú, que convirtió un publireportaje sobre el filme en un falso y muy sensacionalista reportaje en el que se decía que lo que se veía en la película era verdad.
Mi recuerdo es el de toda una generación. Interviú, el semanario de más éxito de la Transición, entraba en muchísimos hogares. En noviembre de 1980 yo tenía 14 años y me acerqué a él como me acerba a siempre, con respeto y temor en busca de una teta y algo más, y eso que en casa lo dejaban ahí, a libre disposición. Y de golpe, al pasar página, la tremebunda historia de los reporteros comidos por caníbales.
Para celebrar todas estas sincronías alrededor de una de mis películas de cabecera, nada mejor que sacar de las inagotables estanterías ausentes ese legendario Interviú y escanear el artículo al completo. Un documento mítico de la España pOp que no podía seguir oculto en la memoria. Con todos ustedes...
Nota: las imágenes que verán más abajo, pese a ser falsas, pueden herir la sensibilidad de algunas personas. Si son ustedes menores de edad o saben que estas cosas les afectan, por muy mentira que sean, háganse un favor y no sigan leyendo.
Nota 2: tampoco está de más advertir que el reportaje era un SPOILER como una CASA.
