7.10.07

DESDE SITGES CON ARDOR (XIV): EL BARÓN CONTRA LOS DEMONIOS


En 1996 el dibujante de cómics Ricardo Ribelles realizó Exorcio Deus Machina, un cortometraje delirante, y decidió continuarlo en forma de largometraje. El resultado es El Barón contra los demonios. Ha tardado diez años. Se rodaba cuando se podía, cuando se reunía algo de dinero. El resultado es la película más radical, fascinante y visionaria que se podrá ver en muchos años. No se engañen: es una serie zeta plagada de efectos especiales artesanales, y la historia una enajenada odisea sobre la batalla entre una organización cristiano-alienígena y las hordas del mal. El propósito de su creador: llevar a la pantalla un tebeo inspirado en la fantaciencia de los cómics de los 80 (Corben, Metal Hurlant) y la pomposidad Jack Kirby. Y lo consigue, plagada de diálogos recargados y bizarros, y con estampas como de un Conan pasado de vueltas (y la influencia del Bad Taste de Jackson). Ya les digo, una obra visionaria y extrema que muchos tildarán como la peor película de la historia del cine. Pero coño, ante semejante propuesta, la de rodar eso, lo imposible, invirtiendo diez años de tu vida en ello y todo tu dinero (porque aquí no hay ni subvenciones ni hostias) y sabiendo que va a fondo perdido, realizando algo tan tan indescriptible, yo es que me quedo sin palabras y soy incapaz de decir nada malo, más bien al contrario. Tan sólo aplaudir a rabiar semejante suicido creativo, tamaño desmadre.

1 comentario:

David dijo...

Yo la vi en el Festival de Sitges, y ahora que ha salido a la venta corrí para comprarla, y la he visto dos veces desde entonces, y puedo decir que me encanta.
Los efectos de la peli son los que son, y algún personaje es de risa, pero la peli es muy interesante y consistente. Un defecto son las exageraciones, por ejemplo los músculos del Barón y los pechos gigantes de Doña Pervertvm... ay si ésta hubiera sido más real, le haría competencia en erostismo a Barbarella...
Me da la sensación como que la trama esconde mucho más de lo que explica, es decir, cada vez que se ve, como que te das cuenta de algo nuevo. Esto es perceptible en toda esa información que aparece en monitores de comunicación, conversaciones y detalles. Y las motivaciones de los personajes están muy bien.
Hay escenas muy curiosas, la de gaiteros en plena batalla futurística, el sacrificio de Doña Pervertvum, la tortura del Barón, y el excelente final, tanto técnica como conceptualmente. Y en discordía con alguna crítica de abajo, para mí la película gana a medida que pasan los minutos, puesto que es cuando se le da mayor consistencia a los personajes.
Como dice Sailoor, ésta puede ser una peli cutre, pero tiene rasgos para convertirse en mítica.