En 1956 el gran
Chuck Jones dirigía uno de mis cartoons de la Warner favoritos:
Rocket Squad. En principio funcionaba como parodia de la serie
Dragnet , icónica y clave referencia del pOp cincuentero que masificó la imagen de la pareja de policias de paisano que recorren los bajos fondos y fuman sin parar, con narración en off pormenorizada en clave temporal. Bastante desconocida para nosotros (pero básica en la pop culture), popularizó en diversos formatos (radiofónico, televisivo, fílmico) casi todos los tópicos que el thriller negro había ido desarrollado.
Pero Chuck Jones era incapaz de quedarse en la mera parodia y trasladaron a Lucas y Porky (los protagonistas) al futuro. El resultado es una auténtica joya de diseños retrofuristas, por no hablar de la fusión entre thriller negro y sci-fi, toda una novedad cuya presencia se deja notar, sin ir más lejos, en
Blade Runner (especialmente la versión original estrenada en el '87). Revisando el cartoon el otro día (obviamente junto a absencito) vi que era imprescindible recopilar capturas del episodio para compartir con ustedes tamaña sucesión de perlas visuales.
Skyline urbanita con sus antenas de telecomunicación, sus pistas de circunvalación estratosférica y las ciudades satélite en lonananza.
Centro comercial de las afueras de la ciudad con diseño a lo
Mies Van der Rohe.
El Rocket policial.
Granja espacial de vacas lecheras.
Central de la policía interplanetaria.
La panorámica de dos diminutas siluetas avanzando en una pista a espacio abierto; es un clásico del retrofuturismo de los 50. El ser humano (bueno, Porky y Lucas) en la inmensidad del futuro que no fue.
Delicioso diseño de estética surrealista para el sistema de control de seguridad a la entrada de la comisaría.
Estación de salida de transporte neumático de personas.
Autopista de transporte neumático por aire comprimido. A finales del siglo XIX hubo diversos proyectos para construir metros suburbanos neumáticos.
Estación de llagada de transporte neumático de personas.
Lucas conectado a la intranet policial.
Estaciones de teletransporte.
Robot policial para la recogida de pruebas.
De nuevo las siluetas en la inmensidad del futuro. Las grandes cristaleras espaciales son otro clásico del diseño retrofuturista.
Computadora para el análisis de pruebas. Tiene luces y hace ping.
Platillo volante para el transporte individual.
La ciudad del futuro.
El teatro de la Estratosfera.
Semáforo espacial.
Palacio de justicia. Destaca la interpretación pop-cubista de la estatua de la Justicia así como el opresivo contrapicado de la entrada de los juzgados.
Y eso es todo, amigos.
A la venta en Halloween, compilando los diez primeros números. Glorioso Precode Granguiñolesco. 
Skyline urbanita con sus antenas de telecomunicación, sus pistas de circunvalación estratosférica y las ciudades satélite en lonananza.
Centro comercial de las afueras de la ciudad con diseño a lo Mies Van der Rohe.
El Rocket policial.
Granja espacial de vacas lecheras.
Central de la policía interplanetaria.
La panorámica de dos diminutas siluetas avanzando en una pista a espacio abierto; es un clásico del retrofuturismo de los 50. El ser humano (bueno, Porky y Lucas) en la inmensidad del futuro que no fue.
Delicioso diseño de estética surrealista para el sistema de control de seguridad a la entrada de la comisaría.
Estación de salida de transporte neumático de personas.
Autopista de transporte neumático por aire comprimido. A finales del siglo XIX hubo diversos proyectos para construir metros suburbanos neumáticos.
Estación de llagada de transporte neumático de personas.
Lucas conectado a la intranet policial.
Estaciones de teletransporte.
Robot policial para la recogida de pruebas.
De nuevo las siluetas en la inmensidad del futuro. Las grandes cristaleras espaciales son otro clásico del diseño retrofuturista.
Computadora para el análisis de pruebas. Tiene luces y hace ping.
Platillo volante para el transporte individual.
La ciudad del futuro.
El teatro de la Estratosfera.
Semáforo espacial.
Palacio de justicia. Destaca la interpretación pop-cubista de la estatua de la Justicia así como el opresivo contrapicado de la entrada de los juzgados.
Y eso es todo, amigos.
