Hace casi diez meses iniciaba uno de mis típicos arrebatos competitivos en un concurso de blogs, el organizado por el diario 20 Minutos. Hoy se han hecho públicos los finalistas. La verdad es que ha sido un concurso polémico. La organización no tuvo en cuenta que la blogoesfera, la burroesfera y la nichoesfera son ámbitos donde el ego se hincha, se convierte en superego y da rienda suelta a sus instintos. El resultado es que las dudas sobre la limpieza de los votos han planeado constantemente sobre el concurso: blogs con más votos que visitas, blogs que se disparaban con nocturnidad y alevosía, blogs nichoesféricos de visión horrorosa subiendo como la espuma... Así, la papeleta en la que se veía envuelta la organización acabó por generar un cierto descrédito, cobrando relevancia el papel del jurado. Viendo un poco al detalle los resultados, la sensación de déjà vu es importante (la blogoesfera habitual impone su ley, y más con un jurado de por medio) además de que alguno de los selccionados no me convencen en absoluto (hay uno con 13 textos y apenas una docena de comments en todo el 2005, menuda decepción).
¡Exacto! No soy uno de los finalistas. Debo reconocer que los mil votos obtenidos (de los cuales unos 250 eran míos, así que gracias a todos ustedes por perder su tiempo en los otros 750), mi natural, innata y elevada autoestima, el esfuerzo y esmero que intento volcar en el Blog Ausente, así como las cosas bonitas que ustedes me dicen casi a diario habían hecho, lo confieso, que albergara una cierta ilusión de verme entre los seleccionados en categorias como mejor blog original, inclasificable o de cultura. No pasa nada, mejor no serlo porque estoy seguro que me pondría insoportable (o aún más insoportable). Además, entre los finalistas se encuentran al menos tres blogs muy amigos de esta casa: La Cárcel de Papel, Mondo Pixel y Papel Continuo, más algún otro que sigo con menos frecuencia. Así que desde aquí mis más sinceras felicitaciones a todos ellos. Las merecen.
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