"A veces, supongo, una idea sobre-valente penetra en la mente como un problema, o un problema imaginario. Esto no es tan raro. Te dispones a acostarte, por la noche, tarde, y de pronto aparece en tu mente la idea de que no has apagado las luces del coche. Miras por la ventana tu coche, que está en la calle, bien visible, y lo ves sin luces. Pero piensas: «Quizá dejé las luces encendidas tanto tiempo que se ha gastado la batería. Para asegurarme, debo bajar a ver.» Te pones una bata, bajas, abres la puerta del coche, te metes dentro, aprietas el interruptor de las luces frontales... Las luces se encienden. Las apagas, sales, cierras el coche y vuelves a casa. Lo que ocurre es que te has vuelto loco, psicótico. Porque no has tenido en cuenta el testimonio de tus sentidos; has visto por la ventana que las luces de tu coche estaban apagadas, pero has bajado de todos modos. Ese es el factor principal: has visto, pero no has creído. O a la inversa, no has visto algo pero lo has creído. Teóricamente, podrías oscilar una eternidad entre el coche y tu dormitorio, atrapado en un círculo cerrado sin fin, abriendo la puerta del coche, probando las luces, volviendo a la casa. y entonces serías una máquina. Ya no más un ser humano."
Extracto de La transmigración de Timothy Archer (Philip K. Dick, 1981)
2 comentarios:
<span>Es lo que se conoce como transtorno obsesivo-compulsivo, y no tiene que ver con la psicosis. El obsesivo-compulsivo no se fía de sus sentidos, ve que el grifo está cerrado pero tiene que volverlo a abrir y cerrar. Sin embargo no pierde el contacto con la realidad, ya que sabe perfectamente que eso que está haciendo es totalmente absurdo, no tiene ningún sentido, pero no puede evitar hacerlo.</span>
respecto de PKD, quizá le interese saber, maese Absence, de la existencia de este libro:
http://www.brainpickings.org/index.php/2011/12/16/the-exegesis-of-philip-k-dick/
Es una alegría encontrar el blog nuevamente activado.
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