18.5.07

LA ENAJENACIÓN QUE DESAFIÓ AL MUNDO (XXXVI)

"La televisión es el instrumento de comunicación más poderoso que nunca haya diseñado el hombre. Más de trescientas cadenas de televisión llevan cada uno de mis sermones por los Estados Unidos y Canadá. De manera que en una sola emisión yo predico a muchos más millones que Jesucristo en toda su vida."

Billy Graham, decano de los telepredicadores estadounidenses y visionario respecto a la teletienda religiosa massmediática. La Frase la he sacado del Zap de Mike Ibáñez, que apunta lo siguiente:
"Negocios paralelos: Grason, editora de álbumes, discos y libros de Graham; Billy Graham Evangelistic Films, Co., que filma sus cruzadas y rueda películas de ficción exhibidas en cines comerciales: Miracle in Manhattan o Mister Texas, una especie de western protestante, films de culto, nunca mejor dicho."

Entenderán que enseguida me he puesto a buscar información por la red sobre las películas, aunque de estas en concreto no hay muchos datos: Mr. Texas es de 1951 y la otra de 1957 y ni siquiera constan en la imdb. Pero indagando un poco más descubro la existencia de World Wide Pictures, también vinculada al telepredicador. Sus producciones más conocidas han sido The Restless Ones (1957), ni más ni menos que una teen exploit religiosa sobre un pastor dedicado al rescate espiritual de jóvenes descarriados. Vamos, en pleno contexto AiPero con el que les doy la lata de vez en cuando aparece una exploit cristiana. La otra: una comedia del 2001 titulada Road To Redemption que, a juzgar por la diminuta carátula encontrada tiene pinta de provocar todo tipo de escalofríos: refelexionen un instante... ¿una comedia desmadrada y cristiana? Cielos. Por cierto, la World Wide Pictures se ha dedicado sobre todo a la distribución y sorprende descubrir que entre las películas que ha movido por tierras usacas están Ana y los Lobos de Carlos Saura (!) y Golgo 13, la adaptación del conocido manga protagonizada por el gran Sonny Chiba. Enésima prueba, pues, que los caminos del pOp de Derribo son más inescrutables que los del Señor. Y de que todo acaba por estar conectado de alguna manera en los territorios ausentes.