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Para una marca de cigarrillos con un mensaje de El Hombre Radiactivo, un viejo anuncio, casi una reliquia del coleccionismo. Se trata de una ilustración publicitaria descubierta, no de forma casual, por Bart durante una convención de cómics en el episodio Tres hombres y un cómic, donde el muchacho va en busca de fetiches de su héroe de papel favorito. Es un excelente discurso metalingüístico, que remite a otro, si bien muy diferente, en El ataque de los adefesios de 15 metros, el segundo de los tres cuentos que componen La Casa-árbol del terror VI, en el que los enormes muñecos de las vallas publicitarias cobran vida y se rebelan; no se trata sólo de un homenaje al cine de serie B de monstruos gigantes, ¿cómo frenar la influencia de los anuncios en la vida moderna?.
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Actualización a 17/02/05 para evitar el borrado de comments de Haloscan
Uno de mis personajes favoritos de toda la serie es el hombre-anuncio Duffman, el superhéroe bizarro con el traje más chulo (una vez me disfracé de él en una fiesta de cumpleaños de un colega; y otro año, de Otto...). Oscar Alarcia 10.19.04 - 11:48 am
Buen apunte, como es habitual viniendo de tí. De Duff hay entrada, creo recordar. absence 10.19.04 - 12:19 pm
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