Veo también en la entrada del segundo aniversario que lo de ponerme llorón con mi tiempo libre es una constante en este tipo de festejos anuales. Y siempre he salido adelante, así que nada de qué preocuparse. Eso sí, me reitero en mi orgullo, en que sigo aprendiendo mucho de los comentarios y en que agradezco rofundamete que pierdan su tiempo visitándome.
Lo mejor de la entrada del tercer aniversario es la cita a Imbécil y Desnudo, el antaño blog y hoy hermosote libro del sr. Lardín que tuve el honor de apadrinar en la FNAC de Barcelona (una de las muchas cosas bonitas que he conseguido escribiendo por aquí). La cita era esta: "escribir siempre desde la fiebre, iluminado por el rayo, chamuscado por una descarga eléctrica e incluso expuesto a las lanzadas de la tribu, con los brazos abiertos y del tirón"
El año pasado el patatín patatán ya lo escribí de carrerrilla, así que poco más que decir: que en el último año mi actividad pública se ha disparado y que hasta gané un concurso de blogs gracias a los votos de todos ustedes.
Me gustaría haber programado una semana llena de textos ausentes, pero no va a ser posible. Eso sí, este año me dedicaré a recorrer lo escrito en los últimos cinco, que hace tiempo que no me releo pues me pone nervioso. Sé que esto de mirar atrás es un recurso un tanto manido, pero no se me ocure otra cosa.
Gracias a todos, pero muy especiales a doña absenta, porque su labor invisible es vital; a mi difunto jefe, porque su capacidad de trabajo liberaba mi cerebro; y a don Raúl Minchinela, porque en su condición de agitador cultural suele contar cnmigo, y eso no tiene precio.
Y ahora les dejo con las ya tradicionales estampas cotidianas de la Mansión Ausente.
El Sr. Ausente prepara contenidos para el Blog bajo la atenta mirada de doña absenta.
El Sr. Ausente muestra las entrañas del Blog Ausente a los amigos de absencito.
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