25 AÑOS SIN MÁSCARA DE PLATA

"Mis películas no son de arte, son para divertir, y si las critican, me parece bien. Cuando en ellas lucho contra el hombre lobo o Drácula, todo es en serio porque debes tomarlo con seriedad; claro, puedes vacilar fuera de escena, pero durante la filmación debe prevalecer el respeto hacia los actores y el director porque si me comienzo a reír se convertiría todo en un cachondeo."

Se cumplían ayer 25 años de la muerte de Santo, el enmascarado de plata. Los lectores del blog saben de mi fascinación por los luchadores enmascarados en general y por el cine fantástico mexicano en conreto. No escribo al respecto todo lo que querría, aunque una de las ideas por las que nació el Blog Ausente era reseñar todas esas películas. Algún día se andará. Pese a ello, es evidente que 25 es una cifra demasiado redonda para dejar escapar un homenaje más visual que otra cosa. Algunas de las siguientes estampas de santos (nunca mejor dicho) proceden de Santo: vida, obra y milagros, muy recomdable especial que pueden descargar aquí y que Frunoflickr descubrió hace ya unos meses.

Rezando antes de un combate.

Con ropa de andar por casa. Esa imagen tan frecuente de los enmascarados mexicanos con batín, transmitiendo la idea de que en su vida doméstica y cotidiana la máscara sigue en su sitio, siempre me ha parecido pura poesía del delirio, seguramente porque supone practicar la quebradora al concepto de la máscara.

Con una de las jamonas de Atacan las brujas (1964)

Uno de los varios carteles de Santo contra la invasión de los marcianos (1966), una de mis favoritas. Lo que nunca he entendido es porque hablan de marcianos si en realidad son marcianas. ¡Y que marcianas!

Lástima que este cartel de Operación 67 (1967) no tenga la calidad suficiente. Clara explotación bondiana, es otra de mis favoritas. Y la idea del agente secreto enmascarado otra delicia.

Una curiosidad: el cartel italiano de Santo en El tesoro de Drácula (1968), también conocida como El vampiro y el sexo. La película cuenta, al menos, con dos versiones, una de las cuales incluía desnudos. Los italianos la estrenaron como Vita Sessuale di un Vampiro, internacionalizaron los nombres de los actores (Noelia Noel se convertia en Jane Nobel y Roberto Ribera en Robert River, por ejemplo) y eliminaron cualquier referencia al luchador enmascarado. El cartel es una joya de la explotación, eso es evidente.

Una obra maestra a la que no se le puede poner ninguna pega: Santo y Blue Demon contra los monstruos (1968). Pocas veces el cine de serie de derribo ha alcanzado tan gozosas cumbres. Me sorprende que los títulos de crédito no estén en el Tutubo. tendré que ponerme a ello.

Cartel español de La venganza de las mujeres vampiro (1970), secuela del clásico de 1962 y primera película del luchador que recuerdo haber visto en mi infancia. Años más tarde descubrí que era una versión censurada, ya que la original incluía desnudos.

Tocando botones de máquinas con lucecitas que hacen ping en Santo contra el Dr. Muerte (1973), rodada en España y dirigida por Rafael Romero Marchent (artesano del eurowestern y uno de los máximos responsables del éxito televisivo Curro Jiménez). El Santo siempre la consideró como su mejor película, la de producción más profesional, y eso que era una serie bé hispano-mexicana. Viene bien para hacerse una idea de como sería la producción del resto.

Una de las ilustraciones de José G Cruz para los tebeos o fotonovelas de El Santo, con sus calaveras, sus espectros y sus cabezas decapitadas.

Y para terminar... Santo torero.