Les dejo una mesmerizante recopilación de las clases de judo impartidas por la deliciosa Black Cat en el comic book homónimo, publicado por la Harvey a partir de 1945 y víctima de la Seducción del Inocente. Wertham criticó la sexualidad que desprendía el personaje (muy evidente en la galería que tienen abajo) y la editorial optó por cambiar la temática hacia el cómic de horror sin darse cuenta de que no era una buena idea. Lee Elias, agotado por la persecución a que fue sometido por Wertham, abandonó el mundo del cómic en 1954, y fue una lástima porque se trataba de un estupendo dibujante que, sin despreciar la evidente influencia de Caniff, estaba especialmente dotado para la movilidad del cuerpo humano y poseía un toque especial que hoy me parece bello y moderno. Por otro lado, es obligado destacar el inocente sado light que destilan las páginas, con la grácil heroína enfundada en escueto cuero negro sometiendo a tormentos disversos a sus contrincantes una vez los tiene en posición horizontal. Al margen de que sólo en una ocasión se enfrenta a una mujer (de aspecto bastante masculinizado), no puedo dejar de mencionar como ciertas dosis de delirio se apoderan de las últimas entregas, con generales, tipos con martillos pilones y hasta jugadores de beisbol dispuestos a ser derribados por la bella Black Cat.
BOLA EXTRA: Tras tanto rapapolvo físico, sin duda te apaterecerá vestir y desvestir a nuestra heroína. Nada más fácil con este recortable donde el picardías de leopardo se alza como pieza más destacable.
Nice collection
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