Colores
Primarios, vivos, sin difuminados, distendidos en anchos fondos, con reflejos casi fosforescentes. Todos los colores en los Simpson resultan aún más evidenciados por las gruesas líneas en negro que marcan los personajes y los ambientes. Son colores inspirados por las corrientes pictóricas del siglo XX, a menudo recordadas a propósito del "design Simpson": el expresionismo, el pop-art, el arte psicodélico, los graffitis. Diez años antes que los Simpson, el teórico Gianfranco Bettetini comentaba lo siguiente del color de la televisión, con una lucidez tan premonitoria que se podría referir perfectamente a los dibujos animados si la palabra “televisión” es sustituida por el término Simpson: "El color electrónico de la televisión no es realmente reproducible en absoluto, sino que tiene una autonomía propia respecto a los tintes de la realidad, ya sea por las cualidades del fenómeno visual en juego como por la gradualidad de las diferentes relaciones cromáticas". El estudioso añade además ( y de nuevo puede verse una anticipación simpsoniana) que el espectro cromático "televisivo es a fin de cuentas un color mágico, de cuento, apto para un uso preferentemente estético de sus capacidades informativas; un color que no es real sino eventualmente hiperrealístico, llevando a una interpretación mágica de la realidad. De hecho, funciona muy bien y adquiere un amplio margen de expresividad en los dibujos animados (fruto de una búsqueda poética y coloreados mayormente por zonas)".
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